Por eso no confío en los teólogos

John W. Loftus es un filósofo estadounidense, crítico de la religión y defensor del ateísmo. Es autor de varios libros de crítica al cristianismo, inspirados en los libros de autores como Sam Harris y Richard Dawkins.

Loftus mantiene un blog, Debunking Christianity («desmintiendo el cristianismo»). Entre las ideas que divulga está la Prueba del Ajeno para la Fe («Outsider Test for Faith»), la noción de que cada creyente debe examinar sus creencias como si fuera un ajeno, un observador externo a ellas.

Una de las críticas que suele hacérsele a Dawkins es que al hacer afirmaciones sobre la existencia de Dios está saliéndose de su ámbito, ya que ese asunto concierne exclusivamente a filósofos y teólogos. En una entrada reciente, Loftus explica por qué esa clase de críticas carece de fundamento:

Pongamos que un reconocido experto en gatos afirma que un gato habló. No hay que ser un experto en gatos para decir que se necesita la evidencia de ello. Tampoco necesitamos una teoría del conocimiento para ponerlo en duda. Pero si tú crees que el gato habló, sí te hace falta. Tendrías que inventarte una buena dosis de gimnasia intelectual para que los demás pensaran que tu afirmación es decente. Moraleja: Tampoco hay que entender mucho de epistemología ni de teología sofisticada para poner en duda la existencia de Dios. En efecto, hasta un niño puede hacerlo.

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